De acuerdo con la FAO, en 2050 la población mundial rondará en los 10 mil millones de habitantes. Aproximadamente, 2 mil millones más que en la actualidad. Siendo la agricultura el pilar fundamental en el que sustenta la alimentación global.
Aplicar la ciencia y la tecnología para poder optimizar los procesos es el futuro de la agricultura, que apuntan a aprovechar los robots, los leds, la ingeniería biológica y la inteligencia artificial para ampliar la producción de una manera más sostenible para el medio ambiente.
Los desafíos son importantes, ya que habrá más bocas que alimentar. Según un estudio del Instituto de Recursos Mundiales, en 2050 se necesitaran 7,400 toneladas de calorías extra respecto a 2010, si la línea de producción continua según las reglas actuales se necesitará un terreno de cultivo dos veces más grande que India.
Ante este escenario, los expertos han ofrecido diferentes respuestas. En los países desarrollados se impulsa el cambio de modelo. De la agricultura industrializada a la orgánica o bio. Los granjeros que se adhieren a esta alternativa tienen que reducir los pesticidas y fertilizantes y cambiarlos por otras sustancias más naturales.
Al contrario de lo que se pueda pensar, los productos agrícolas que se consumen a diario en el mundo no provienen en su mayoría de grandes corporaciones. El 90% de las granjas mundiales son gestionadas por un individuo o una familia. Y ese 90% produce el 80% de la comida del planeta.
En la transición de un modelo a otro, los agricultores, en países desarrollados y en vías de desarrollo, son la clave. Incentivar y apoyarlos es fundamental.
Algunas propuestas de los expertos en este asunto son:
- La smartfarming o agricultura inteligente, es un concepto de gestión agrícola que usa tecnología para aumentar la cantidad y calidad de los productos agrícolas.
- Usar el GPS para optimizar su producción y hacerla más sostenible.
- Sistemas de monitoreo del suelo en tiempo real para ajustar y acotar la cantidad de fertilizantes.
- En los países en vías de desarrollo, los teléfonos móviles permiten a los agricultores tener una conectividad mayor con el sistema y optimizar su tiempo.
- Los robots se utilizan en las labores pesadas como la carga de mercancía, la recolección de productos, la plantación, el riego, el cuidado de los animales y el mapeo o distribución por medio de drones.
- Las granjas verticales, se tratan de una especie de invernaderos de gran dimensión de varias plantas de altura en las que las líneas de plantación estén en estantes, unas encima de otras. En estas estructuras se cultivarían plantas usando disoluciones agrícolas en vez de suelo de cultivo.
- La biotecnología se centra en aumentar la productividad, mejorar los cultivos y en dar apoyo a las prácticas más ecológicas. Con la investigación y aplicación de la biotecnología se puede aumentar y mejorar las propiedades organolépticas y nutritivas de un determinado alimento. Conociendo el metabolismo de las plantas, por ejemplo, se pueden potenciar los nutrientes necesarios y ausentes en las dietas de los habitantes de algunas de las zonas más desfavorecidas del planeta.