Cuidado de los rosales durante el verano

Las rosas son unas de las flores favoritas en los jardines alrededor del mundo, tienen una gran variedad de tonos y colores, además de una dulce fragancia que las caracteriza. Existen más de 30,000 especies de rosas, que se dividen en tres grupos: rosas antiguas, rosas silvestres y rosas modernas.

Para lograr que nuestros rosales se mantengan floreados y hermosos durante el verano, debemos implementar algunas acciones.

Riego abundante

En temporadas calurosas, se requiere una mayor cantidad de agua para que las raíces de nuestras rosas se mantengan humectadas. Además, es recomendable que a la hora de regarlas seamos cuidadosos de no mojar los pétalos, sino aplicar el agua directamente al sustrato, esto para evitar que las hojas y los pétalos se dañen con la luz solar, así como una posible creación de hongos.

Podar las rosas marchitas

Con ayuda de unas tijeras para jardín, corta desde el tallo las flores que ya estén marchitas. Es importante seguir este paso para que nuevas rosas comiencen a florecer. Es un buen momento para revisar que tu rosal esté sano y no tenga ninguna plaga o enfermedad. Si descubres que algunas de las ramas están secas o enfermas, también deberás deshacerte de ellas. Asegúrate de que las tijeras que utilices estén bien afiladas para que tus cortes puedan ser precisos.

Apóyate del abono

Lo ideal sería agregar abono a tus rosas después y antes del invierno, es decir, en primavera y en otoño. Sin embargo, en caso de haber olvidado abonarlas durante primavera, no está de más hacerlo en verano.  Hay muchos tipos diferentes de abono beneficiosos para tus plantas y rosales, uno de ellos es el Mulching, y puedes saber más sobre él aquí.

Deja que tomen mucha luz solar

Si tus rosales se encuentran en un jardín, lo más seguro es que tengan una buena exposición al sol, pero si mantienes tus rosas dentro de casa, es mejor que estén cerca de alguna ventana. Las rosas pueden resistir la sombra, pero para que estén más sanas y alegres es recomendable que tengan una exposición de al menos 5 horas a la luz solar.