Es una modalidad de agricultura más sustentable, comparada con la tradicional, que realza la biodiversidad y los procesos biológicos naturales del suelo. Basa su filosofía en tres principios:
Mínima alteración mecánica del suelo
No se utiliza maquinaria ni herramientas para trabajar la tierra, esto para mantener el estado natural del suelo. Al no modificarlo se evita la compactación y encostre del suelo, se previene la erosión, no se generan tantos gases de efecto invernadero y se mejora la fertilidad de la tierra.
Cobertura orgánica permanente del suelo
En el suelo permanecen los residuos del cultivo anterior, ya sean los de preparación y/o los de cobertura, que servirán como abono para la nueva siembra. Con esta medida, la temperatura del suelo es moderada y hay mayor infiltración de agua, disminuyendo su evaporación.
Rotación de cultivos
Se combinan dos o más cultivos en una sola parcela de manera secuencial lo que permite que se balancee la producción de residuos, es decir, los residuos de un cultivo serán el abono de otro. Además, se reduce el riesgo de plaga, se controla la maleza y se distribuyen de manera equilibrada los nutrientes en el perfil del suelo.
Los beneficios de este tipo de agricultura no solo son ambientales, también impactan en el ámbito laboral y económico de los campesinos. Su jornada laboral es menor, se reduce el riesgo económico (en caso de que se ven afectados negativamente los cultivos) y se mejora el rendimiento de su siembra.
Casos de éxito
A través de proyectos liderados por el Hub Pacífico Norte con apoyo del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), hay productores que ya están impulsando estás prácticas sustentables para lograr sistemas agroalimentarios más resilientes.
Tal es el caso de Juan Enrique Habermann Gastélum, un agricultor sinaloense, que implementa la agricultura de conservación desde hace 4 años en sus plantíos de frijol ejotero y maíz blanco. Esta modalidad le ha permitido ahorrar mucho tiempo y dinero, pues ya no tiene que invertir en nuevos sistemas de riego o maquinaria.
También comenta que uno de sus grandes logros ha sido aumentar el rendimiento de sus cultivos, de 10 a 14 toneladas por hectárea.
