- Brindan mayor seguridad alimentaria
El 95% de los alimentos se produce en nuestros suelos. Los suelos intercambian nutrientes y agua con las raíces de la planta. Cuanto más saludable es el suelo, mejor será la cosecha. El suelo es un recurso no renovable y su preservación es esencial para la seguridad alimentaria.
- Más diversidad
Los suelos albergan la cuarta parte de la biodiversidad de nuestro planeta. La biodiversidad es importante para el bienestar de nuestro planeta; ayuda a las especies a sobrevivir y adaptarse a los cambios en la naturaleza. Preservar la biodiversidad significa ayudar a hacer nuestro planeta resiliente, adaptable y saludable.
- Menos gases de efecto invernadero
Los suelos ayudan a combatir y adaptarse al cambio climático. Cuando se gestionan de forma sostenible, los suelos pueden jugar un papel importante en la mitigación del cambio climático almacenando el carbono (secuestrando carbono) y disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera.
- Agua más limpia
Los suelos son clave para el suministro de agua limpia. Los suelos capturan, almacenan y filtran el agua. Los bosques en las zonas altas no solo previenen la erosión del suelo, sino que también garantizan agua potable de buena calidad. Los suelos también almacenan agua, haciéndola disponible para cultivos.
- Mejores medios de subsistencia
Los suelos saludables pueden garantizar la seguridad alimentaria, proporcionar mejores medios de subsistencia y reducir la migración forzada. La degradación de los suelos supone la pérdida de fuentes de alimentos y medios de vida.
La implementación de estrategias de gestión sostenible del suelo que ayuden a los agricultores a enfrentar las sequías a largo plazo y la degradación del suelo puede ayudar a que las personas tengan opciones frente a la migración.
- Más medicinas
Los suelos son importantes para la salud humana. La mayoría de los antibióticos más conocidos, incluida la penicilina, se originaron a partir de microorganismos del suelo.