El forraje es cualquier alimento vegetal que se utiliza para la alimentación de los animales, ya sea en forma de pasto, heno, silaje u otros alimentos que se utilizan en la dieta de los animales.
En este contexto, Jerónimo Díaz Celaya, productor de forraje para vacas en la Ciénega de Zimatlán, en el estado mexicano de Oaxaca, ha incorporado nuevas técnicas de plantación para diversificar sus cultivos y mejorar la calidad de su forraje, lo que ha dado lugar a un aumento en la producción de leche y carne.
Él y otros productores participan en el proyecto “Fortalecimiento del Acceso a Mercado para Pequeños Productores de Maíz y Leguminosas en Oaxaca, Chiapas y Campeche”, impulsado por la Fundación Walmart y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT). A través de este proyecto, reciben asesoramiento para diversificar los cultivos de manera sustentable.
Durante el invierno, Jerónimo cultivó una combinación de canola, grass pea, avena y alfalfa, lo que resultó en un aumento significativo en la producción de leche gracias a la calidad del forraje. Aunque los ingenieros midieron los resultados, Jerónimo no lo hizo como productor, pero pudo apreciar los beneficios obtenidos.
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La canola y el grass pea solo producen un corte, mientras que la avena proporciona un segundo y tercer corte. Jerónimo notó un mayor rendimiento en la siembra de alfalfa, en comparación con la forma tradicional de cultivo, ya que las raíces de los distintos cultivos se quedan a diferentes profundidades, lo que genera pequeños huecos al secarse las raíces y proporciona una mejor oxigenación al suelo, favoreciendo el crecimiento de la planta. De hecho, la alfalfa creció más que la de las parcelas vecinas, lo que entusiasmó a Jerónimo al compartir sus conocimientos con otros productores que se acercan a preguntarle.
El productor Jerónimo Díaz de la Ciénega de Zimatlán, en Oaxaca, México. (Foto: Francisco Alarcón / CIMMYT)
Además de los nuevos cultivos, Jerónimo ha experimentado con la crotolaria, una combinación de una planta gramínea y una leguminosa, sembrada junto con maíz para ensilar. Esta mezcla mejoró la fertilización y la calidad del forraje.
Los ingenieros del CIMMYT explicaron en una parcela demostrativa y luego Jerónimo pudo ver los resultados en sus propias parcelas. Los rendimientos fueron tan buenos que parecía que nunca terminaba de cortar el forraje de esa parcela, según el productor.
Para Jerónimo, las semillas son excelentes y han demostrado ser efectivas en sus terrenos, obteniendo muy buenos resultados en la producción de leche. Actualmente, están trabajando para repetir el proceso en el siguiente ciclo y medir el rendimiento en términos de producción de leche.
El productor está dispuesto a permitir que los ingenieros hagan su trabajo en sus terrenos para seguir obteniendo resultados positivos y espera que otros productores se interesen en esta forma de cultivar, ya que ofrece muchos beneficios.
Fuente: CIMMYT
