Algunas veces nuestras plantitas pueden adquirir olores indeseados, sobre todo si las estamos haciendo crecer en agua. Siempre es importante que mantengamos el agua del florero limpia, y que la cambiemos al menos dos veces por semana, pero además existen otros trucos para evitar los malos olores en nuestros floreros.
- Lavar los tallos
Cuando vamos a poner nuestras flores por primera vez en su florero, es importante que limpiemos muy bien los tallos antes de introducirlas al agua. Debes hacerlo con cuidado para no dañarla y no es necesario tallar con fuerza, bastará con frotar suavemente con los dedos para quitar posibles residuos de tierra o mugre que en un futuro podrían causar malos olores.
- Cortar las hojitas
Para mantener un olor neutral en tu florero, otro consejo es podar las hojas de la planta para que no estén en contacto directo con el agua. De otra manera, las hojas se pueden pudrir rápidamente debido a la humedad constante, y así ocasionar aromas indeseados.
- Una buena exposición al sol
Dependiendo de la plantita, pueden tener reacciones diferentes al sol. Algunas necesitan una exposición más prolongada, mientras que otras prefieren la semisombra. Lo ideal para evitar que despidan un olor desagradable es mantener una exposición neutra, donde el espacio sea muy iluminado pero no una exposición directa.
- Agregar una aspirina al recipiente
Algunas veces, las bacterias pueden causar malos olores en nuestras plantas, y un excelente truco para mantenerlas alejadas es usar una aspirina en el agua del florero. Lo único que debes hacer es introducir una pastilla al agua y dejar que se desintegre. Si el problema de mal olor es constante, lo mejor será repetir el proceso dos veces a la semana.
- Cortar los tallos
Además de limpiar muy bien los tallos antes de introducir las plantas al florero, es importante cortarlos de vez en cuando.
El contacto constante con los tallos podría llegar a dañarlos, así que es importante mantenernos atentos a su estado, y si los notamos flácidos o como que empiezan a pudrirse, deberemos cortar aproximadamente 2 centímetros para mantenerlos frescos y sanos.