El mango es una de las frutas tropicales más populares alrededor del mundo, y el mango ataulfo resalta por su delicioso sabor. En la década de los 50s, Ataulfo Morales compró un terreno con árboles de mangos que daban un fruto especialmente dulce y de inmediato supo que estos árboles tenían mucho potencial. Fue así como, con la ayuda del ingeniero Hétor Cano Flores, comenzó a investigar estos mangos y experimentar con nuevos injertos, hasta que poco tiempo después crearon el emblemático mango ataulfo; fruto cien por ciento mexicano. Desde el 4 de agosto de 2003 este fruto cuenta con Denominación de Origen, lo que lo convierte en un fruto muy joven comparado con otros ejemplares.
Este codiciado mango tiene una composición de 69% pulpa dulce, 19% cáscara y 8.5% semilla, lo que refleja la enorme cantidad de pulpa que puede ser aprovechada.
Qué cuidados darle al mango ataulfo
El árbol del mango ataulfo puede cultivarse en jardín o en una maceta grande, si es sembrado en maceta obtendremos una versión más pequeña del árbol. En condiciones más libres y con mayor espacio para expandir sus raíces.
Se debe sembrar la semilla a aproximadamente 2 o 3 centímetros de la superficie. Debido a que es un fruto tropial, prefiere los climas cálidos y es importante mantener el sustrato húmedo. La semilla puede sembrarse en cualquier momento, pero la mejor época para otorgarle los cuidados que requiere es durante primavera o verano.
Es muy importante controlar la cantidad de agua con la que lo reguemos. Aunque es cierto que prefiere la tierra húmeda, soporta mejor la falta de agua que el exceso de ella. Te recomendamos estar siempre al pendiente para no pudrir tu árbol de mango.