Australia se posiciona a la vanguardia de la agricultura sostenible con una inversión multimillonaria destinada a la preservación y estudio de la colección de rizobios más grande a nivel global.
La iniciativa, liderada por la Universidad Murdoch y la Corporación de Investigación y Desarrollo de Granos de Australia (GRDC), busca asegurar el futuro de estos microorganismos esenciales para la fijación de nitrógeno en los cultivos.
Una colección invaluable de más de 100 países
La primera etapa de esta ambiciosa instalación ya alberga 11.800 cepas de rizobios, con una capacidad proyectada de 32.000. Un logro significativo ha sido la unificación de 38 colecciones nacionales e internacionales, muchas de las cuales corrían el riesgo de perderse. Este material genético único proviene de muestras recolectadas en más de 100 países desde la década de 1950 e incluso antes.
Un banco genético funcional para el mundo
Más allá del almacenamiento, la instalación opera como un banco genético funcional, ofreciendo muestras a investigadores de todo el mundo a través de un catálogo en línea. Esta disponibilidad global facilitará el avance en la investigación y aplicación de los rizobios en la agricultura.
Rizobios: los aliados naturales del nitrógeno
Los rizobios son bacterias con la asombrosa capacidad de establecer una relación simbiótica dentro de los nódulos de las raíces de las leguminosas. En este proceso, fijan el nitrógeno atmosférico, transformándolo en una forma que las plantas pueden utilizar para su crecimiento.
Esta acción natural reduce significativamente la necesidad de fertilizantes nitrogenados sintéticos, generando ahorros de miles de millones de dólares anuales en la agricultura a nivel mundial.
Hacia una red internacional de preservación
El Dr. Graham O’Hara y el Dr. Jason Terpolilli, líderes de la iniciativa en la Universidad Murdoch, están impulsando la creación de una Red Internacional de Rizobios. Esta red conectará centros de investigación y conservación de colecciones de rizobios en todo el planeta, fomentando la colaboración y el intercambio de conocimientos.
Un futuro sostenible para la agricultura
La inversión de Australia en esta colección de rizobios subraya la creciente importancia de las soluciones biológicas para una agricultura más sostenible. Al preservar y estudiar estos microorganismos, se abren nuevas vías para reducir la dependencia de los fertilizantes sintéticos, mejorar la salud del suelo y promover prácticas agrícolas más amigables con el medio ambiente.
Más info aquí: The quest for the perfect rhizobia–legume matches