Las hierbas de cocina o hierbas de olor son muy utilizadas en el ámbito culinario, ya que dotan de mucho sabor y aroma a muchos platillos.
Estas pueden cultivarse y cosecharse fácilmente en casa a través de macetas o huacales.
Tienen propiedades que les permiten brindar estos beneficios cuando están frescas o secas.
Es por eso que te presentamos dos maneras para secarlas correctamente y algunas ideas de las plantas que puedes agregar a tu huerto urbano:
Secar en rejilla
- Lava tus hierbas únicamente con agua y quita toda la tierra que puedan tener.
- Sacude ligeramente para quitar el exceso de agua y con un pañuelo de papel (servitoalla o papel de estraza) seca lo más que puedas. Hazlo a toques pequeños y sin ejercer presión sobre las hierbas.
- Coloca las hojas sobre una rejilla con patas altas o medianas para que el aire pueda circular por arriba y debajo. Ten cuidado de no encimarlas.
¡Ojo! Puedes colocar como base una servitoalla o un pedazo de periódico para evitar que las hojas caigan por los huecos de la reja.
- Colócalas en un espacio seco y deja que se sequen por dos o tres días.
- Posteriormente guárdalas en un recipiente sellado para que conserven el aroma por más tiempo. Los frascos de mermelada o mayonesa son perfectos para estos efectos.
Secar en hilo
- Lava tus hierbas únicamente con agua y quita toda la tierra que puedan tener.
- Sacude ligeramente para quitar el exceso de agua y con un pañuelo de papel (servitoalla o papel de estraza) seca lo más que puedas. Hazlo a toques pequeños y sin ejercer presión sobre las hierbas.
- Forma pequeños ramilletes de no más de 10 ramitas y átalas en lo más bajo del tallo.
- Coloca los ramilletes boca abajo y cuélgalos. Puedes hacerlo en un mecate, estos son trenzados y pueden abrirse para colocar los ramos.
- El lazo debe estar en un lugar aireado y seco para que las hierbas puedan secarse.
- Gira los ramos cada tres o cuatro horas para que se sequen uniformemente. Dentro de tres o cuatro días las hierbas estarán lista para ser almacenadas.