Cómo hacer injertos frutales

Cuando hablamos de realizar Injertos nos referimos a cuando unimos una parte de algún ejemplar (frutal, cactácea, floral o de hortaliza) con otro para lograr que tenga un mejor desarrollo y crezca como una sola planta.  Al injertar podemos propagar una especie o incrementar el cultivo de diversas especies frutales o vegetales para obtener una mejor producción e incrementar la cosecha.  Para realizarlos necesitas:  

• Ubica dentro de tus ejemplares seleccionados para hacer el injerto una rama que sea recta y tenga el doble de tamaño de la que deseas injertar (de grosor y largo).  Trata que sean parecidas, sobre todo en la parte interna.
• Quita las hojas del pedazo que deseas añadir, respetando el nudo y la yema.  Recuerda que este debe tener una longitud de 10 a 15 centímetros.
•  En este mismo y sobre la base de la rama, con ayuda de una herramienta afilada (machete, sierra, serrucho, cuchillo o navaja) corta en diagonal y en forma de cuña.
• También realiza otro corte a la mitad de la rama que recibirá el injerto, este debe tener una profundidad media. De esta manera la rama injertada podrá sostenerse y completar el proceso más fácilmente.
• Inserta el injerto a la rama principal, el corte en diagonal debe estar boca abajo haciendo que las estructuras internas de ambas ramas coincidan. Amarra ambos pedazos con cuerda o rafia para asegurar que se mantengan siempre unidos.

     

• Después, cubre el injerto con plástico transparente de cocina (papel film). No te preocupes si se llega a rasgar mientras lo colocas, esto le permitirá transpirar.
• Procura que el injerto reciba poca luz solar, esto para evitar que las ramas se sequen y se pierda todo el trabajo realizado. ¡Ojo! Esto no quiere decir que debas privarlo del sol, solo controla las condiciones.
• Deberás monitorear el avance de tu injerto y verificar que no se haya secado o le hayan salido hongos.  Con el paso del tiempo observarás que este  se ha unificado, incluso podrás ver como nuevas ramas nacen.
• ¡Ojo! No apliques nada (riego, fertilizantes, herbicidas o control de plagas) sobre el injerto durante el proceso de sanación, ya que podría matarlo. Sigue los cuidados normales de tu árbol central.